Una escalada extraordinaria:
el Everest sin oxígeno para David Goettler

El 21 de mayo, el atleta Julbo David Göttler subió a la cima del Everest por primera vez. Tras dos intentos fallidos en 2019 y 2021, el alpinista de 43 años llegó al «techo del mundo» sin botella de oxígeno y sin sherpas. Ya era su sexto éxito en la cumbre de un ochomil. Hablamos con él de la experiencia. 

¿Qué se siente después de subir al «techo del mundo» en tu tercer intento? 

Es algo increíble. Sobre todo después de haber puesto tanta energía, pasión y tiempo en este proyecto. Y emocionalmente es realmente otra dimensión, porque anteriormente tuve que abandonar en dos ocasiones. Por eso lo aprecio aún más. Además, tuve la suerte de pillar un día en que estuve solo del todo desde la cima sur hasta la cumbre, y eso es absolutamente excepcional en el Everest.

¿Cuál fue el mayor reto de esta expedición?

En principio, eran dos sobre todo. Primero era importante no caer en la trampa de comparar la escalada actual con las tentativas anteriores. No tenía que ponerme nervioso si, por ejemplo, un tramo me llevaba un poco más que en un intento anterior. Lo importante al hacer montañismo era y es centrarse totalmente en el aquí y el ahora. Esto lo he trabajado con mi coach mental. El otro reto era mi forma de subir la montaña sin oxígeno y sin la ayuda de sherpas. Es un deporte distinto del que hace el 98 % de los escaladores aquí, con oxígeno y con sherpas. Los tiempos y las fases de aclimatación son diferentes y es importante no compararte con otros escaladores, sino de encontrar tus propios tiempos. 

¿Por qué decidiste subir a la cima del monte Everest sin botella de oxígeno y sin el apoyo de sherpas, tú solo?

Es la única forma que yo concibo de subir picos de 8000 m. El reto está precisamente en el poco aire que hay a gran altitud y es la única forma que tengo de afrontar este reto. Nunca he usado máscara de oxígeno para subir. Me encanta hacer ascensos en equipo, pero solo con compañeros del mismo nivel. En general, me gustaría hacer un poco más transparente el montañismo de gran altitud por encima de 8000 metros. 

¿Cuáles fueron las condiciones? ¿Hubo algún incidente especial?

El tiempo fue espectacularmente bueno. Pero tuve un solo pequeño momento de mal tiempo y hasta el último segundo estuve preocupado por si podría salir o no. Las previsiones meteorológicas en el campamento eran muy distintas, pero al final me atreví y el viento se calmó un poco, así que tuve las condiciones perfectas para el ascenso. Solo se cerró un poco en el descenso. Ese reto es mayor a fin de cuentas; aquí tienes que fijarte unos objetivos claros y seguir un plan. Los tuve y, por supuesto, medí constantemente si tenía suficientes fuerzas para volver sano y salvo. 

Pasemos ahora al tema del equipamiento y la protección solar. ¿Cuáles son los criterios más importantes para ti en este sentido? 

En cuanto al equipamiento, no puede haber ninguna duda sobre la calidad de las gafas de sol, de esquí, y especialmente sobre la elección de las lentes, que es el motivo por el que llevo muchos años confiando en Julbo. Hay dos aspectos especialmente importantes para mí: ¿Los productos funcionan bien con el resto de mi equipamiento? Y no deben empañarse bajo ningún concepto. Eso sería un desastre absoluto. Así que para esta expedición opté por la ULTIMATE COVER con lentes fotocromáticas REACTIV que se oscurecen y aclaran automáticamente para adoptar un rango de protección de 2 a 4. Actualmente, estas gafas de sol son sin duda el no va más en máscaras de glaciar ligeras del mercado. También la máscara de esquí CYRIUS con lente REACTIV con un rango de protección de 1 a 3.  Las lentes que se oscurecen y aclaran automáticamente son perfectas para mí, porque puedo llevarlas en cualquier momento, haga el tiempo que haga. No solo protegen del sol y el viento, sino también del peligro a menudo subestimado de la ceguera de la nieve. 

Después de haber cumplido semejante objetivo, ¿qué retos tienes por delante? ¿Ya tienes algún plan?

Lo mejor es que, a pesar de este logro tan importante, siempre hay otros objetivos con otras montañas u otras dificultades. Mi lista aún es muy larga. De momento me he fijado pequeños objetivos intermedios, como correr la ultra-trail para seguir entrenando. Dentro de unas semanas empezaré a planificar los siguientes grandes proyectos de nuevo.